Un hecho que causó rechazo en el mundo del deporte pasó en una velada de las artes marciales mixtas profesionales, cuando Ali Heibati intentó darle una patada a la modelo que exhibía el cartel del siguiente asalto en el cuadrilátero.
Por tanto, no podrá volver a competir en el marco de la liga rusa. Una sanción que se veía venir, pues ya estaba en el punto de mira de la organización por incitar a la violencia por su forma de pelear en las peleas previas al combate.
Decenas
de aficionados al deporte han condenado el comportamiento de Heibati en redes sociales, tachando de "vergonzoso" y "deplorable" su actitud con respecto a la chica del ring, que posteriormente se ha identificado como "María".
De origen iraní, pero con domicilio en Rusia, a Heibati le pareció normal y jocoso y lo hizo, pero con tan mala fortuna que no solo perdió el combate, sino que no volverá a pelear en su carrera. Ni las disculpas que ofreció lo salvarán de la determinación drástica.